Tu microbioma intestinal no solo es único, sino también dinámico: cambia debido a tu dieta, tu estilo de vida, factores ambientales e incluso el estrés.
Una prueba de microbioma ofrece una visión del microbioma intestinal y permite la detección temprana de desequilibrios. Si realizas un cambio en la dieta basado en los resultados de la prueba y trabajas específicamente en un aspecto de tu salud intestinal, recomendamos repetir la prueba después de 3 meses y verificar los progresos.
Para verificar tu microbioma y tu salud intestinal, recomendamos realizar la prueba cada 6 meses.
Al realizar la prueba repetidamente, puedes verificar regularmente tu salud intestinal y detectar un desequilibrio a tiempo para contrarrestarlo.